‘Poder mediático y derecho a la información veraz’ es un artículo recientemente publicado por el para mi desconocido Javier Segura en el Portal «Contexto y Acción«, que resume con claridad meridiana los riesgos de la concentración mediática y los condicionantes derivados de la publicidad millonaria de las grandes corporaciones. Y que denuncia el abuso de la comunicación cuando ésta es entendida como un descarado intento de controlar y manipulart tanto a periodistas como a audiencias.Algunas frases que todos, y especialmente los consumidores de la información, deberían tener grabadas a fuego para no perderlas de vista:
- La razón de ser de la profesión periodística en una sociedad de libertades es la contribución a la formación de una opinión pública libre y plural, fundamentada en el derecho de la ciudadanía a una información veraz y contrastada.
- La principal amenaza al binomio libertad de expresión-derecho a la información veraz, sobre el que descansa la formación de una ciudadanía crítica, procede de la concentración de la propiedad de los principales medios de comunicación en colosales grupos económicos en los que participan accionistas de todos los sectores económicos, especialmente bancos y fondos de inversión.
- También actúa como un poderoso condicionante la dependencia de los ingresos procedentes de la publicidad de las grandes empresas anunciadoras. Así, las élites financieras (…) establecen las líneas rojas de lo que no debe decirse en dichos medios.
- La comunicación, tal como la conciben estas élites, tiene como función principal, en vez de informar o formar, la de convencer al conjunto de la ciudadanía.
- Los grandes grupos dominantes en el mundo de la comunicación disponen de una extensa nómina de mercenarios mediáticos que invocan el principio sagrado de la libertad de expresión para autoarrogarse la licencia para mentir, difamar, intoxicar.
El artículo completo en http://ctxt.es/es/20160601/Firmas/6409/comunicacion-medios-veracidad-derecho-poder.htm
La ilustración es obra del dibujante colombiano Alfredo Garzón.
