Paul Simon tituló una de sus canciones «Una sencilla e inconexa diatriba«. Esto no pretende llegar a tanto, es más bien una divagación, por lo demás un tanto demagógica. OK, vamos allá.
Lista de las nueve personas más influyentes del siglo XXI (según un tal Scott Padula, un tipo del que Google solo conoce ésto):
- Steve Jobs (Apple)
- Los Fundadores de Google
- El Dalai Lama
- Osama Bin Laden (Al Qaeda)
- Bill Gates (Microsoft)
- Mark Zuckerberg (Facebook)
- George W. Bush (ex-presidente de los EE UU)
- Los Fundadores de Twitter
- James Cameron (director de cine)
Para revista «Forbes» son éstos los 10 que se llevan la palma:
- Vladimir Putin (presidente de Rusia)
- Barack Obama (presidente de los EE UU)
- Xi Jinping (presidente de China)
- El Papa Francisco (máxima autoridad de una monarquía absoluta electiva y teocrática, que constituye el país más pequeño del mundo, con una basílica que ocupa el 7% de su territorio, y cuya lengua oficial es el latín)
- Angela Merkel (canciller federal de Alemania)
- Janet Yellen (presidenta de la Reserva Federal de los EE UU)
- Bill Gates (CEO de Microsoft)
- Mario Draghi (presidente del Banco Central Europeo)
- Sergey Brin y Larry Page (cofundadores de Google)
- David Cameron (primer ministro del Reino Unido hasta julio de 2016)
La clasificación de la revista «Time» es un poco más complicada, y puede consultarse aquí.
El periódico colombiano «El Espectador» estableció una lista alfabética de las 100 personalidades más relevantes de la primera década del nuevo siglo, integrada por nombres de la Cultura, la Ciencia, la filosofía, la economía…
Siempre discutibles, si nos vamos a rankings de los personajes más relevantes del pasado siglo nos encontraremos a menudo con nombres como los de Einstein, Henry Ford, Churchill, Hitler, Kennedy, Mao, Lenin, el Che, Freud, Mandela, Gandhi, Juan XXIII… Sin olvidar a personalidades de la farándula y el entretenimiento como Chaplin, Marilyn Monroe, Walt Disney, John Lennon… O nombres más o menos inclasificables, como la recién ascendida a los altares Teresa de Calcuta o Lady Di, que ya era santa desde finales de los años 90.
Viene todo esto a cuenta de que la agencia Apple Tree Communications acaba de hacer público un informe acerca de las «personalidades más influyentes del mundo online«, eso que se ha dado en llamar influencers. La escalofriante lista es la siguiente:
- Taylor Swift, cantante
- Cristiano Ronaldo, ego autodidacta
- Kate Perry, cantante
- Selena Gómez, cantante
- Rihanna, cantante
- Shakira, cantante
- Justin Bieber, cantante, trampantojo post-adolescente
- Beyoncé, cantante
- Kim Kardashian, exuberancia tele-real (también canta)
- Ariana Grande, cantante
A escala española, esto es lo más de lo más:
- Enrique Iglesias, miembro de la saga
- Andrés Iniesta, centrocampista ofensivo
- Sergio Ramos, némesis de Gerard Piqué
- Gerard Piqué, némesis de Sergio Ramos
- Iker Casillas, ex-portero del Real Madrid, ex-yerno ideal
- Rafa Nadal, yerno ideal
- Carles Puyol, ex-futbolista sudoroso
- David Villa, ex-futbolista europeo
- Alejandro Sanz, inexplicado e inexplicable fenómeno OVNI
- Cesc Fábregas, futbolista
No se trata de que a uno le parezca mejor persona Adolf Hitler que un astro del balompié, pero de ahí a poner en pie de igualdad la Teoría de la Relatividad con un video musical de la MTV, o de equiparar la responsabilidad de liderar las principales potencias mundiales con los muy azarosos fines de semana de Justin Bieber, dista un trecho.
Se trata simplemente de que, en ocasiones, y a la vista de los contenidos que hacen furor en las redes (y de sus perpetradores), uno se acuerda de aquel sketch de Les Luthiers sobre los programas de variedades en televisión:
No deje de ver, como todos los sábados,
la kermesse de los sábados. Como broche de gala,
el sensacional entretenimiento:
«¡El que piensa… PIERDE!»
