En el Valle de Arán, el grupo Neoelectra puso en marcha en 1999 una experiencia singular: una central de ciclo combinado alimentada con gas natural, asociada a una planta de recuperación de CO2 y a una piscifactoría especializada en la cría de esturiones. Un proyecto que combina la eficiencia energética, la reutilización de un gas de efecto invernadero y la elaboración de un producto gastronómico de primera calidad.
Reportaje publicado en el último número de la revista «GAS ACTUAL», que edita la Asociación Española del Gas-Sedigas (nº158, Enero-Marzo 2021).